CRIA DE CARACOL DE TIERRA

BUSCANDO LA SEGURIDAD ALIMENTARIA

La seguridad alimentaria no solo debe estudiarse, es urgente tomar cartas en este problema, de manera que se puedan tomar medidas y ejecutar acciones hacia la búsqueda de formas alternativas de alimentación.  En este tema; existen tanto diferencias conceptuales como operativas que en su momento pueden llevar a largas y desgastantes discusiones.  La definición adoptada indica que existe seguridad alimentaria "Cuando todas las personas tienen en todo momento acceso físico, social y económico a los alimentos suficientes, inocuos y nutritivos que satisfagan sus necesidades energéticas diarias y preferencias alimentarias para llevar una vida sana y activa".

En los últimos años se ha hecho énfasis en el consumo de carnes que no sean las tradicionales como la carne de res, cerdo, pescado, pollo, etc. Es por esta razón, que haciendo estudio de un posible mercado de compra, se ha encontrado que los países europeos principalmente Francia, España, e Italia, son los países mayor importadores de carnes alternativas, entre ellas el caracol de tierra. También, países como Canadá ya están consumiendo carne de caracol y lo presentan como uno de los platos exóticos en los mejores restaurantes de comida internacional. Así  el “Helix Aspersa” se ha convertido en un potencial proveedor de carne.

El proyecto de cría de caracol, consiste en la cría, engorde y venta de caracol de tierra de la clase conocida como “Helix Aspersa”.  Este  proyecto no requiere de mucho capital de inversión y no requiere de compleja y onerosa infraestructura. Para iniciadores pueden ir desarrollando el proyecto en casa, basta con solo preparar condiciones mínimas de manera que los caracoles no se escapen. A medida que se vaya desarrollando y poblando la crianza, se puede pensar en buscar un lugar especial adecuado para un cultivo a mayor escala, o mejor dicho a escala comercial.

Cada vez la situación económica de los pueblos es más difícil, la economía familiar poco a poco se vuelve más precaria, principalmente en los sectores más necesitados. La cuarta región, en Chile, es típica por sus índices de pobreza. La minería que en otros tiempos fue un fuerte bastión económico, ahora ya no representa un ingreso estable en la economía de la región. 

La Iglesia Evangélica Luterana como tal, no está al margen de los problemas económicos, sociales y políticos del país. Es por esa razón que si revisamos su historia, nos damos cuenta que ha estado acompañando a la gente,  especialmente los más pobres, los excluidos del sistema.  La crisis internacional nos ha afectado a todos y las iglesias no son la excepción, eso la ha llevado a tomar medidas de control y austeridad, con la finalidad de salir a delante con su proyecto evangélico y su labor diaconica.

En la ciudad de Coquimbo en los años 2004 y 2005 se desarrollo este proyecto experimental, del cual se muestran algunas fotografías para su apreciación. 

Coquimbo, Agosto 18 de 2005.

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